23 enero 2006

Bolivia y su nuevo Presidente




No fue una sorpresa para nadie. Aún para los más recalcitrantes enemigos políticos de Morales. Pero si es un hecho histórico relevante que en el Continente americano resulte electo un Presidente con raices indigenas. Ello por los motivos que a continuación desarrollaremos.

Historicamente, los pueblos originarios de América han sufrido la pobreza, el desarraigo, el abandono y la desigualdad. Se han visto marginados socialmente y enfrentados a prejuicios socio culturales, los cuales han desprestigiado su cultura y su cosmovisión. No han sido respetado la mayoría de los Derechos Humanos de los indigenas, ni de sus descendientes. En ciertos casos, ser indigena o tener un apellido indígena es motivo de burla, de discriminación, de denostación hacia esa persona. Por ello, resulta que la elección de Evo Morales, un indio Presidente, viene a enaltecer el orgullo de pertenecer a una etnia, de pertenecer a un pueblo originario. No solamente en Bolivia, cuya población es sobre un 70% de raíz indígena, sino que de todas las razas de nuestra América morena.

La unidad que podría sugir en relación con el indigenismo en América significa un incentivo para el diseño, creación y desarrollo de grupos políticos indígenas, que buscan alcanzar cuotas de poder relativas en cada estado, con el objetivo de poner sus demandas en la agenda política de los mismos países en que estan presentes. Sin embargo, considero importante estimar una escalada internacional, es decir una suerte de movimiento interncional indigenista, que actuará en las más altas esferas, sin considerar el país o la regíon donde dichos pueblos se establezca. Dicho de otro modo, se viene a partir de ahora, una fuerte corriente indigenista en todos los países, que pondrá en agenda muchos temas de los cuales los indigenas han presentado a las autoridades respectivas, sin ser escuchados, sin ser considerados.

Las políticas públicas que cada país del continente diseñe y desarrolle para enfrentar la temática de los pueblos originarios, deberá contar con un amplio respaldo político y principalmente, el respaldo ciudadano necesario para que dichas políticas tengan éxito. Y por otra parte, que sean eficaces y eficientes, dado que ahora más que nunca se verán sometidos al escrutinio ciudadano, que buscará en las autoridades la responsabilidad por las cosas bien hechas.

Se le viene a Bolivia y a su pueblo la oportunidad de crecer y desarrollarse como nación. Se le viene la oportunidad única a Evo Morales de transformarse en un redentor de su patria. Un heroé nacional que traspasará las culturas. Le deseamos el mayor de los éxitos en ésta magna tarea.

Si no lo logra...que será de ti Bolivia?